En qué consiste la #regladelostercios y cuando es conveniente usarla?
El objetivo principal de la regla es quitar ese impulso de centrar el objeto de interés en las fotografías y cambiarlo por una percepción descentralizada y más equilibrada.
"El centro de atención debe colocarse en la intersección de las líneas imaginarias que dividen una fotografía en 3 partes de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha". En palabras sencillas, se divide la imagen en 9 partes iguales por medio de 4 líneas, 2 horizontales y 2 verticales.
Los cruces de estás líneas sitúan los puntos fuertes ideales para colocar los objetos de interés, logrando una composición con mejor equilibrio. Según la teoría, las líneas horizontales sirven como referencia para situar el horizonte de la fotografía.
¿Cuándo no es tan conveniente usarla?
Una vez que se tiene presente la regla, lo mejor es usarla cuando realmente se consiga un resultado destacable, pero siempre de la mano de tu creatividad. Las reglas son para romperse, entonces si en alguna ocasión estás indeciso sobre usarla o probar con alguna otra toma, puedes capturar ambas y luego compararlas para elegir el mejor resultado.
A final de cuentas, el propósito es que te olvides de centrar los objetos y así conseguir un plano con mejor distribución, pero tampoco se trata de hacer todas las fotografías idénticas.